Soy LI
SHEN, Melchizedek del agua. Hoy por petición del Comendador de los Ancianos
vengo a aportaros ciertos elementos, con relación a la acogida del Cuerpo
Eterno, del Cuerpo de Fuego, en esta dimensión, en vuestro cuerpo físico. Desde
hace años he trabajado junto con el conjunto de los Melchizedek, trabajando
sobre todo a nivel individual y de vuestras estructuras etéricas y físicas.
Hoy me
acerco pues para compartir ciertas orientaciones y detalles generales que os
permitirán acoger vuestro Cuerpo Eterno, aquí en esta dimensión, si es lo que
la Luz os pide en este momento. Como de costumbre acojamos juntos el Concilio
de los Melchizedek.
…Comunión
con el Concilio de los Melchizedek…
En este
sentido no vengo a daros nada nuevo, yoga o movimiento, simplemente a
recordaros con mi Presencia, vuestra facultad de Ser la Luz por vuestra
Presencia en esta dimensión. Dimensión que acoge un nivel de frecuencias de las
cuales había sido privada, estas Nuevas Frecuencias después de numerosos años
han obrado en vuestro Cuerpo, en este Sistema Solar y en la Tierra.
Como ha
sido dicho y repetido, el momento es ahora de Ser la Luz. Por lo tanto todo lo
que habéis integrado durante estos años como enseñanza, ejercicio o práctica a
nivel exterior, tiene que ser trascendido por una acción espontánea y directa
de vuestro Espíritu. Esto quiere decir que ahora mismo la diferencia más
importante no está en cuál es el ejercicio, en cuál es el movimiento, sino en
cuál es vuestro origen.
Por mi
Presencia que facilita la fusión de vuestro Cuerpo Físico y Etérico con el
Cuerpo de Luz, el Cuerpo de Fuego, os vengo a mostrar la posibilidad, de
convertiros en la Luz, de expresar a través de las herramientas de vuestra
personalidad y del alma, la voluntad y la Fuerza del Espíritu. Esto implica que
cualquier acción viniendo espontáneamente del Espíritu será siempre una
liberación y un resurgimiento de vuestro Propio Ser Eterno, de vuestra acción
Libre y Espontánea dentro del Corazón. Si por el contrario buscáis conseguir
ciertos efectos, a través de ciertos protocolos exteriores, es muy posible que
esto tenga resultados en vosotros, pero jamás será el mismo efecto de una
acción o movimiento expresado desde la Gracia y la espontaneidad de la Verdad
que Sois.
Para que
el Espíritu pueda expresarse en la Palabra, Pensamiento y Obra en este mundo,
necesita un campo limpio. Un campo permeable a vuestra voluntad. Es por eso que
haciendo comunión en mi Presencia, como Melchizedek del Agua, estabilizo la
circulación del agua en vosotros, estabilizo las emociones y la raíz mental.
Permitiendo que en ese momento en donde el “switch” (ndt: traslado) de la
consciencia se produce, actúe desde la propia Esencia, desde la propia Raíz de
la Verdad.
Vosotros
sois la Verdad de toda Eternidad, pero expresarla aquí con la fuerza y la
convicción, en esta dimensión no es tan fácil. Requiere de vosotros una Paz,
una Confianza total, un abandono total a la Luz que Sois. Ningún miedo puede venir
a interferir pues a partir de ese momento, será la personalidad quien tomará el
control.
Así pues y
primero que todo, el arraigo, es uno de los puntos a tener más presentes. El
arraigo a vuestras propias raíces, estéis en la montaña o en la ciudad, -
sabemos que existen circunstancias facilitadoras. Pero os hablamos de Ser, en
vuestra raíz, en vuestra tierra firme, en la roca. Desde esta roca todo
movimiento es posible, sin la roca todo tiene la tendencia de dispersarse en el
aire.
Es la roca
y el arraigo a través de vuestros pies y de la Onda de Vida, que os facilita
esta Presencia Silenciosa y Eterna, Presencia que se basta a ella misma como
Presencia.
Es
importante que vuestro cuerpo físico, en este caso las piernas, tengan una
circulación adecuada para facilitar a la Onda de Vida su circulación. En este
sentido podéis espontáneamente hacer movimientos a nivel también de vuestras
rodillas y de las articulaciones a nivel de los dedos y de los pies. Esto es
igual para vuestros brazos y también para el cuello. Si recordáis bien ciertos
movimientos han sido dados por el Comendador, estos movimientos son de
actualidad en el sentido de que permiten activar y facilitar la circulación en
ciertos puntos de vuestro circuito energético (movimientos de inclinación del
cuello en dirección de los 4 elementos).
Si podéis
dejad que esto suceda en la espontaneidad de vuestro día a día, simplemente por
vuestra Presencia en este cuerpo, dejad que él dance y haga los movimientos que
se requieren para permitir la buena circulación de la Energía Vital en vuestro
cuerpo físico y cuerpo Etérico, permitiendo a la Luz Vibral invadir vuestra
estructura física y Etérica. También la posición de las manos colocadas a la
altura del diafragma y de vuestra respiración os permite elevar la vibración a
nivel de vuestro pecho, permitiendo a la puerta OD abrirse y activar el punto
de irradiación del Chakra del Corazón y el punto ER. La respiración es también
importante. Cuando muchos de vosotros sois llamados ahora a llevar a cabo ciertas
acciones en este mundo, la respiración siempre es vuestro vínculo con el
Corazón y de vuestra interiorización. Estad atentos tanto a las señales de la
respiración como de vuestro cuerpo, para actuar en consecuencia,
espontáneamente en el momento, desbloqueando vuestro cuerpo físico, permitiendo
irradiar la Luz.
No sois
todos los que sois llamados a hacer esta integración; para quien así sea
procurad pues facilitar el trabajo de la Luz en vosotros, en vuestra posición,
en vuestro centrado en el Corazón, en vuestra Rectitud y Abandono. De este modo
veréis que el cuerpo mismo se libera y se descomprime de ciertas constricciones
que lo afectan, permitiendo una dilatación de vuestra estructura, permitiendo
al Fuego quemar en vuestro interior, desplegando la irradiación de lo que Sois,
del Amor que Sois, purificando la estructura del cuerpo, permitiendo la
circulación de vuestra vibración y de la sangre, hasta alcanzar a atravesar la
puerta de vuestro cuello, permitiendo la activación de la Corona Radiante del
Corazón y de la Cabeza en Fusión.
La carne
de la Tierra tiembla, así vuestra carne vibra mientras está recibiendo el
Espíritu. Dejad pues a la carne fecundarse a través del Fuego a través de las
frecuencias que llegan a Resucitar la Presencia Eterna aquí.
Yo soy LI
SHEN, Melchizedek del Agua. Podéis llamar mi nombre en cualquier circunstancia
cuando lo sintáis para facilitar la fusión del cuerpo físico y del Cuerpo de
Luz. Igualmente en vuestros momentos de alineamiento no caigáis en la rigidez,
dejad a vuestro cuerpo físico relajarse, desbloquearse a nivel de la espalda y
de los hombros. Llamad mi nombre para facilitar estos procesos en vuestro
cuerpo.
Recibid un
abrazo, recibid todo el Fuego del Concilio de los Melchizedek, en este momento
todos presentes en la acogida del Fuego del Cielo y de la Tierra.
Gracias
hermanos y hermanas, hasta la próxima.
Transmitido
por Sijah Sirius
Traducción:
Lucía Montaño Ferrer
Del Colectivo
de los Niños de la Ley del Uno.
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